fuente Diario Ole
Almeyda la gastó en la cancha y, según contó, le quedó aire. “Sentí ganas de ir a cantar con los hinchas”, dijo el Pelado.
Antes del partido hablaba con Ariel (Ortega) y le decía que no sé si todos sentirán lo mismo que nosotros: que cada vez que la gente empieza a gritar, nuestros corazones laten de una manera diferente...”. Matías Almeyda se emociona. Su relato transmite más que palabras. Le sale del alma. Como el festejo del gol de Funes Mori frente a Tigre, cuando el Pelado miró a la popular, levantó los brazos, saltó y gritó al compás de la locura de miles de fanáticos de River. El estaba en la cancha, en plena batalla, pero su corazón se trepó hasta la Sívori. Y lo dice: “Me dieron ganas de ir a cantar con los hinchas”.
En el ambiente del fútbol, la declaración puede tildarse de “tribunera”. No es el caso de Almeyda, porque el histórico 5 no necesita quedar bien ni ganarse el cariño de la gente. Ya contaba con el amor incondicional de la tribuna antes de su “veterano” regreso, y hoy se transformó en ídolo. Porque se cargó en sus espaldas el peor momento en la historia del club y, a pesar de sus 36 años y toda la gloria cosechada en su carrera, transpira la Banda hasta quedar tan exhausto que tarda más de dos días en recuperarse de los dolores musculares. “Soy un agradecido de poder defender esta camiseta porque realmente la siento en mi corazón”, dice. Y asegura que las ovaciones de la gente “me hacen notar cuando juego bien”.
El Pelado pensó en retirarse al final del Clausura. Incluso, Cappa le avisó que buscaría a otro 5. Sin embargo, Matías decidió luchar, como siempre. Renovó su vínculo “porque no quiero irme con River en esta situación complicada” y convenció al DT de que ningún otro volante central puede rendir mejor que él con la camiseta de River. Llegaron Acevedo y Ballón, pero Almeyda sigue deslumbrando a Cappa. Y a la vez, los hinchas ya no saben cómo elogiarlo... El clásico “Pelaaado, Pelaaado” les resulta tan pequeño que también lo eligieron como la figura del partido en La Página Millonaria. El sentimiento, se ve, es recíproco, de ida y vuelta. Los hinchas quisieran jugar como Almeyda, estar en el césped del Monumental. Y el Pelado, cantar con ellos en la popular...
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