miércoles, 31 de marzo de 2010

"Si no juegan los chicos, hay que poner al Super 8"

Fuente Diario Ole

Almeyda acepta la crítica, compadece a los pibes y aunque no pierde la fe, marca lo mal que trabajó River en la última década. "Han desmantelado al club", dice.

-¿Crees que este es el momento de poner a los más chicos?

-Es triste que tengan que soportar tanta presión, pero es la realidad del club y tenemos que aceptarla.

-¿No hay otra?

-Y... Si no juegan los chicos, hay que poner al Súper 8, a los veteranos, porque no hay más jugadores.

Si todos estuvieran como él, la sugerencia tendría mucho de solución. Pero descolgar los botines después de cuatro temporadas sin rodaje y convertirse en uno de los mejores del equipo por méritos propios parece una misión imposible. Y postergar a los Funes Mori, Villalva o Pereyra por los Medina Bello, Cardetti o JJ Borrelli puede ser una interesante movida marketinera u otro manotazo de ahogado. Por eso, Matías Almeyda lo dice pero enseguida aclara que la salida para este River pasa por un proceso lento e inevitable. "La realidad es que le estamos poniendo el pecho a un montón de situaciones de un club que en los últimos diez años no hizo las cosas bien. Y que hoy está tocando fondo".

Sin ser un optimista del gol, el Pelado igual no pierde su costado positivo. Acepta estar "dolido y triste", pero jura y se compromete a "dejar hasta el último pellejo por esta camiseta, a dar todo hasta que se me caigan los músculos". Eso sí, su fuerza interior no le nubla la vista y, en charla con Un Buen Momento, deja en claro quiénes son los responsables del caos. "Nada es justificativo de que nosotros en la cancha no ganemos, pero esto no pasa por los jugadores, por el cuerpo técnico ni por la nueva dirigencia, que hace tres meses que asumió y que encontró un montón de cosas al levantar las tapas de las ollas". Y sin hacer nombres propios, sigue con fuerza: "Antes River tenía jugadores de 28, 32 años y los pibes acompañaban, se iban fogueando. Hoy cambió todo. Han desmantelado al club. Por eso digo que River no va a cambiar de un día para el otro. Hay que ser inteligente, pensar a futuro".

¿Y si sale todo al revés? "Habrá que seguir trabajando. Nos tenemos que romper el alma para sumar la mayor cantidad de puntos. Y estar todos juntos, todos unidos, porque este momento difícil va a ser difícil hasta el último partido. Sabemos que hasta que se termine el torneo no nos van a gritar cosas lindas".

No hay comentarios: