Fuente Diario Ole
Almeyda actualizó la vieja disputa generada con Verón tras el affaire Lamela. Así, el Pelado dejó en claro que el partido de la penúltima fecha será como una final.
Cuando venga Verón va a ver que somos hombres”. Matías Almeyda, futbolista argentino contemporáneo.
Esta frase de hace un mes y nueve días acaba de ser actualizada ante la inminente visita de la Brujita y compañía al Monumental. Hoy, o mejor dicho ayer, el capitán de River usó otras palabras para decir prácticamente lo mismo: “Esperamos ese partido con muchas ganas. Estudiantes viene arriba y para nosotros la intención es sumar los últimos tres puntos de local y que Estudiantes no pueda salir campeón contra nosotros”.
Almeyda obvió, incluso, ese lugar común del fútbol que indica que primero hay que disputar el partido del próximo fin de semana. Es Colón el rival de turno. Pero es al equipo liderado por su ex compañero de Lazio y Selección al que más anhela arrebatarle el triunfo. Esta revancha se inscribe en la escalada de declaraciones que ambos pronunciaron en los últimos tiempos. Las fotos que difundió River con las secuelas sufridas por Lamela, Curbelo mediante, encendieron una vieja enemistad latente. Juan Sebastián disparó: “parecen nenas”. Matías Jesús replicó: “Verón va a tener que venir a jugar contra River y va a ver que jugamos como hombres. Y si alguien le pega una patada, que después no llore”. Y el fixture los juntó en un compromiso que invariablemente será decisivo en la resolución del torneo.
Pero más allá de la cuestión personal, Almeyda es consciente de que River necesita los puntos por una razón porcentual: seguir arriba de Huracán y afuera de la Promoción. “Esta situación incómoda es una de las peores de la historia”, dijo en La Red. “Por suerte se ha notado un cambio con los últimos resultados. Todos estamos aportando para salir”.
Sin querer queriendo, entonces, se metió en la discusión acerca del estilo Jota Jota. El potencial candidato para suceder al DT, que hoy por hoy insiste en que le quedan seis meses para la jubilación, adhiere a las formas que se han utilizado en los últimos partidos. “El fútbol ha cambiado, no sólo el paladar de River. A diferencia de otros momentos, hay que vivir el presente. El hincha se dio cuenta de esto y nos apoya desde otro lugar. Valora la entrega. El juego es distinto porque tenemos que sumar puntos, y ésta es la táctica para conseguirlo”. Del tiki tiki pasó al punto punto. Cosa de Brujas.
Cuando venga Verón va a ver que somos hombres”. Matías Almeyda, futbolista argentino contemporáneo.
Esta frase de hace un mes y nueve días acaba de ser actualizada ante la inminente visita de la Brujita y compañía al Monumental. Hoy, o mejor dicho ayer, el capitán de River usó otras palabras para decir prácticamente lo mismo: “Esperamos ese partido con muchas ganas. Estudiantes viene arriba y para nosotros la intención es sumar los últimos tres puntos de local y que Estudiantes no pueda salir campeón contra nosotros”.
Almeyda obvió, incluso, ese lugar común del fútbol que indica que primero hay que disputar el partido del próximo fin de semana. Es Colón el rival de turno. Pero es al equipo liderado por su ex compañero de Lazio y Selección al que más anhela arrebatarle el triunfo. Esta revancha se inscribe en la escalada de declaraciones que ambos pronunciaron en los últimos tiempos. Las fotos que difundió River con las secuelas sufridas por Lamela, Curbelo mediante, encendieron una vieja enemistad latente. Juan Sebastián disparó: “parecen nenas”. Matías Jesús replicó: “Verón va a tener que venir a jugar contra River y va a ver que jugamos como hombres. Y si alguien le pega una patada, que después no llore”. Y el fixture los juntó en un compromiso que invariablemente será decisivo en la resolución del torneo.
Pero más allá de la cuestión personal, Almeyda es consciente de que River necesita los puntos por una razón porcentual: seguir arriba de Huracán y afuera de la Promoción. “Esta situación incómoda es una de las peores de la historia”, dijo en La Red. “Por suerte se ha notado un cambio con los últimos resultados. Todos estamos aportando para salir”.
Sin querer queriendo, entonces, se metió en la discusión acerca del estilo Jota Jota. El potencial candidato para suceder al DT, que hoy por hoy insiste en que le quedan seis meses para la jubilación, adhiere a las formas que se han utilizado en los últimos partidos. “El fútbol ha cambiado, no sólo el paladar de River. A diferencia de otros momentos, hay que vivir el presente. El hincha se dio cuenta de esto y nos apoya desde otro lugar. Valora la entrega. El juego es distinto porque tenemos que sumar puntos, y ésta es la táctica para conseguirlo”. Del tiki tiki pasó al punto punto. Cosa de Brujas.
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